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Pirenópolis Goiás, Brasil. Entre calles empedradas y mansiones coloniales del siglo XVIII, la puesta de sol anuncia el final de otro hermoso día en la histórica ciudad de Pirenópolis.
Frente a las puertas y ventanas de colores y la hermosa vista del Río das Almas, los turistas pasean por el bucólico Centro Histórico y disfrutan del clima de la campiña de Goiás.
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Después de un día de deliciosos baños en las encantadoras cascadas, es hora de deleitarse con los platos típicos y los buenos restaurantes de la región.
Un paquete completo para quienes buscan relajarse y dejar atrás el ritmo acelerado de las grandes ciudades.
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Disfrute de cada minuto y entre en el ritmo de Pirenópolis cuanto antes. No tardará en sentirse abrazado por este encantador pedazo de la campiña brasileña.
Pirenópolis es el destino perfecto para los viajeros que desean días tranquilos en plena naturaleza, pero sin renunciar a la comodidad y al buen servicio.
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Situado a sólo 150 km de Brasilia y a 130 km de Goiânia, Piri es fácilmente accesible por carretera y puede visitarse incluso en una excursión de un día.
Tal facilidad hace de Pirenópolis un itinerario muy buscado por quienes disponen de poco tiempo, pero desean relajarse mucho.
La buena noticia es que las atracciones de Pirenópolis se ajustan a todos los turistas, desde los que desean tranquilidad absoluta hasta los amantes de aventura.
Disfrutar de Pirenópolis
Pirenópolis es el típico destino rural del que nos enamoramos rápidamente y al que ya queremos volver incluso antes de terminar el viaje.
La ciudad y las cascadas de la región son encantadoras tanto para una excursión de un día como para quienes deseen relajarse en unas vacaciones más largas.
Así que no te apresures a hacerlo todo deprisa. Lo bueno es disfrutar sin prisas y aprovechar todos los bellos paisajes que ofrece la ciudad en pleno interior de Goiás.
Visitando el Centro histórico de Pirenópolis
Al llegar a Pirenópolis, pronto se dará cuenta de que la ciudad es realmente encantadora. Para ello, bastará con un rápido paseo por el Centro Histórico.
Las casas coloniales que impregnan las calles empedradas son la cara de la ciudad.
Es difícil no fijarse en los colores que se adueñan de las calles con las ventanas y puertas de madera, siempre pintadas caprichosamente.
Para recorrer el Centro Histórico de Pirenópolis, comience el recorrido por la Iglesia Matriz de Nossa Senhora do Rosário, desde donde tendrá una hermosa vista de la ciudad. Desde allí, recorra las calles cercanas y descubra todos los rincones de Piri.
Merece la pena visitar los edificios históricos del Cine Pirineus, el antiguo Teatro de Pirenópolis y la antigua Casa del Parlamento y Cárcel, que hoy alberga el Museo de lo Divino.
Una visita a la Iglesia de Nosso Senhor do Bonfim y a la Iglesia y Museo de Arte Sacro Nossa Senhora do Carmo también son buenas opciones.
En el camino, pase por el puente Rio das Almas, desde donde podrá ver la impresionante Igreja Matriz en medio del paisaje de la ciudad.
Y si le gustan los puentes, merece la pena hacer una foto del puente colgante de Doña Benta.
En el resto, basta con pasear por las calles y disfrutar de cada escenario, sin olvidar registrar las típicas Cavalhadas enmascaradas que se encuentran diseminadas por Pirenópolis en sus más diferentes versiones.
Visitando las cascadas de Pirenópolis
Después de pasear por el centro histórico, es hora de disfrutar de las cascadas de Pirenópolis. Y hay muchas opciones para quienes gustan de un buen baño de agua dulce en plena naturaleza.
La ciudad cuenta con más de ochenta cascadas, varias de las cuales ofrecen infraestructuras para turistas.
El acceso es casi siempre fácil y por eso Pirenópolis es ideal para toda la familia.
No hay que recorrer largos senderos y, en muchos casos, el camino hasta la cascada está asfaltado, una buena opción para quienes no estén dispuestos a caminar largos recorridos.
Ahora bien, si eres un fanático del buen senderismo, no te preocupes, ¡también hay opciones de cascadas para ti!.
Entre las cascadas favoritas de los turistas están: la Cascada de Abade, la Cascada de Lázaro, la Cascada de Santa Maria, la Cascada de Rosário, las Cascadas de Bonsucesso, la Cascada de Paraíso y el complejo de las Cascadas de Lobo, así como las Cascadas de Dragões, todas con acceso pago y con múltiple facilidades para los turistas.
Para los que dispongan de más tiempo en la ciudad, también merece la pena visitar la Cascada de Araras, la Cascada de Coqueiro con la Cascada de Garganta, la Cascada de Meia Lua, la Cascada de Usina Velha, el Santuario de Vagafogo e incluso ampliar la visita al Saldo do Corumbá.
Conociendo los Museos locales
Pirenópolis ofrece a los turistas algunos pequeños museos que ayudan a contar la historia de la ciudad y el pasado de Goiás.
Merece la pena recorrerlos para conocer mejor la región. Lo difícil, del recorrido y hay que admitirlo, es encontrarlos todos abiertos.
Los horarios de apertura son muy irregulares y hay que confiar en la suerte.
La excepción, que abre todos los días en horario regular, es el Museo Rodas do Tempo, que cuenta la historia de los vehículos de dos ruedas.
La colección es extensa y la exposición fascinante, incluso para quienes no son coleccionistas ni aficionados a las bicicletas y motos. Merece la pena visitarlo.
Otros museos que pueden visitarse en Pirenópolis son el Museo del Divino y el Museo de las Cavalhadas, ambos centrados en la Festa do Divino, la fiesta religiosa más tradicional de la ciudad.
Para los amantes del arte sacro, también merece la pena visitar la iglesia de Nossa Senhora do Carmo, donde se encuentra el Museo de Arte Sacro.
Probando la deliciosa cocina de Pirenópolis
Las cascadas de Pirenópolis son realmente espectaculares, pero si hay un detalle de la ciudad que levanta pasiones entre los turistas es la gastronomía regional.
Los sabrosos platos típicos de Goiás son el punto culminante de la experiencia de viaje en Pirenópolis y vale la pena probar cada uno de ellos.
Los deliciosos sabores del interior de Goiás están bien representados en los menús de los restaurantes de Pirenópolis, que también complacen a los que buscan recetas más elaboradas y platos internacionales.
La ciudad cuenta con una escena gastronómica bien desarrollada y será fácil degustar elaborados manjares.
Hay muchas opciones de restaurantes, con precios que varían mucho. En Piri es fácil comer barato, pero también es fácil encontrar establecimientos con precios similares a los de las grandes capitales. Hay opciones para todos los bolsillos y gustos.
Se puede invertir en platos a base de pequi( planta nativa de Brasil); en las maravillosas galinhadas; en el corpulento empadão goiano (con o sin guariroba); en las suculentas pamonhas (saladas o dulces) preparadas con el maíz más puro; en las galletas y dulces caseros que alegran a los turistas en los desayunos de las posadas y en las abundantes sartenes con todo tipo de ingredientes inimaginables.
También puede probar conservas de carne y platos calientes con diferentes combinaciones para acompañar las cervezas y vinos locales.
Los restaurantes de Pirenópolis se concentran principalmente en el centro histórico, donde varias calles ofrecen menús variados.
Para llegar a la más concurrida, diríjase a la Rua do Rosário, también llamada Rua do Lazer. No tendrás que apegarse a la comida regional y podrás recorrer el mundo saltando de un menú a otro.
En Piri hay cafés, bistros, pamonharia, autoservicios de lujo, restaurantes con un refinado menú internacional y también restaurantes de granja. Lo que todos tienen en común es la fina preparación y el condimento de Goiás.
Alojarse en Pirenópolis
Pirenópolis tiene una buena oferta de posadas y las hay para todos los gustos y bolsillos.
Al visitar la ciudad, conviene estar atento a los periodos de temporada alta, que suelen tener una gran demanda y tarifas muy elevadas.
Si es el caso de tu viaje, reserva alojamiento con antelación.
La zona más popular para alojarse en Pirenópolis está alrededor del centro histórico, donde se encuentran los principales restaurantes y la animada vida nocturna de la ciudad.
Quienes prefieran un mayor contacto con la naturaleza también encontrarán buenas opciones más alejadas del centro, donde los precios suelen ser más amables.
¿Cuánto tiempo quedarse en Pirenópolis?
Pirenópolis es el destino perfecto para un fin de semana de diversión y también para unas largas vacaciones de relax.
La ciudad merece incluso un viaje de ida y vuelta desde Brasilia y Goiânia. Gran elección para un viaje de última hora, Pirenópolis encaja en cualquier itinerario.
Para aquellos que quieran explorar las principales cascadas y atracciones de Pirenópolis, un viaje de cinco a siete días es perfecto.
Pirenópolis ofrece a los viajeros un recorrido fácil y encantador. Entre las calles de la ciudad y las cascadas de la región, no será difícil dejarse encantar por este maravilloso pedazo de Goiás.
Tips sobre Pirenópolis
Pirenópolis es una ciudad muy segura para los turistas y pasear por las calles solo o de noche no supone ningún problema.
Aun así, tenga cuidado con los objetos de valor y no los deje desatendidos en cascadas, senderos o dentro del coche;
Los senderos más comunes de Pirenópolis están bien señalizados y no es necesario contratar un guía para realizar las caminatas. Las cascadas, en general, están situadas en zonas privadas con acceso controlado.
Rara vez se aceptan tarjetas para el pago de la tasa de visita a las cascadas. Disponga siempre de dinero en efectivo. En los restaurantes es habitual que se acepten tarjetas, pero a menudo sólo la opción de débito.
En la ciudad de Pirenópolis hay sucursales de los principales bancos del país. Además, hay oficinas de correos y tiendas de lotería;
La ciudad dispone de una amplia gama de tiendas, farmacias, mercados y gasolineras. No se preocupe si tiene que hacer una compra de última hora;
La señal telefónica suele fallar en zonas alejadas del centro de la ciudad, como las cascadas. No cuentes con ella para resolver problemas urgentes. En las posadas y restaurantes, la conexión Wi-Fi es habitual
El uso de zapatos deportivos o de montaña son de uso obligatorio si no quiere sufrir algún tipo de accidente.
Durante la estación seca, beba mucha agua para evitar el riesgo de deshidratación.
Lista básica de artículos para llevar
- Cámara de fotos y cámara subacuática.
- Calzado de senderismo o deportivo.
- protector solar y repelente de insectos
- Medicamentos de uso personal
- Ropa de baño
- Mochila pequeña para excursiones cortas
- Chaqueta para el invierno (durante el día hace mucho calor, pero por la noche hace mucho frío)
- Gorra, sombrero y gafas de sol
- Bolsa impermeable
- Botella de agua (durante la estación seca, es muy importante)
